Hace más de 30 años inicia la historia de Cuca con José Fors y Carlos Avilez quienes, en casa de una amiga que tenían en común, coincidieron en una velada llena de música. José se acercó a Carlos y le cuestionó ¿dónde esta el rock? La respuesta estaba en ellos: hacer una banda.
Ignacio González (Nacho) llega por Galileo Ochoa (Galo), quien aceptó la propuesta de Carlos de armar una banda, con la condición de que sólo se animaría si iba Nacho también.
Avilez recuerda con sumo detalle una ocasión que se encontraba en un cine de Guadalajara y alguien le tocó el hombro. Cuando volteó, dio con Galo, quien le dijo que debían salir inmediatamente. Se dirigieron a un bar cercano, en el que ya se encontraban los demás integrantes y, tras una amena platica, fueron al cuarto de ensayos.
Todos contaban con un historial metalero, dar nacimiento al sonido de Cuca sería complejo. Ese día José ya tenía unas ideas, pero el arranque fue un jingle para jabones que le habían rechazado a Galo. Al empezar a tocarlo, José cantó:
Tú sabes que yo me muero por ti mi vida, yo me muero por ti mi amor.
Tras unos arreglos que le hicieron para darle un espíritu rockero, nace el ‘El Son del Dolor’, uno de los himnos de la agrupación.
La premisa del sonido que distinguiría a la agrupación fue el hacer canciones que ellos quisieran oír en otras bandas, un rock honesto, que tenga personalidad y te permita identificarte. Rolas que se hagan para que puedas disfrutar de un momento eufórico, con música, buenos cuates y una chela en mano.
La invasión de Cuca inicia en el 92, y después de todos estos años, en este 2020, podemos asegurar que el rock and roll que hace la banda, se siente, se vibra y es inherente a su esencia. Esta es la razón por la cual Cuca, trasciende generaciones a tal punto que en sus conciertos hay personas de todas las edades y en todos los formatos.
“Eso hace la diferencia entre rock viejito y rock clásico, nosotros somos un clásico”
La crítica, la burla, el tono sexoso e irreverente y la honestidad con la que pintan sus canciones, es manifiesto de los 30 años de trayectoria de la agrupación. Así como se burlan de los hombres, pueden echar carrilla a las mujeres y, al mismo tiempo, tocar temas trascendentales como el qué chingaos es la vida solo para descubrir que cuando te aprendes las reglas del juego, el cuerpo ya no te da.
Hay pocos que tienen las agallas de hacer un rock más pesado y aún más complicado lograr que triunfe, que resuene, que permanezca. Cuca pasó de ser una banda, a volverse una empresa para terminar su metamorfosis en la concreción de una familia. Y es esa convivencia, dentro y fuera del escenario, la que los alienta a seguir.
Con la entrada de Alex Otaola, Cuca ha renovado energías y se sienten plenos. Alex, aseguran ellos, le da un sonido muy potente, rudo, un atasque de la guitarra que desde el primer ensayo supieron que iba a funcionar.
Así es como, el pasado 14 de febrero sale “Pornoblattea”, octavo álbum de estudio de la banda, con un sonido fresco pero bajo la misma línea sonora: la experimentación de melodías soneras con bases pesadas.
Los primeros sencillos que se presentaron fueron ‘Sirenita al Revés’ y ‘No Me Digas Que No’. El 28 de febrero, como tercer sencillo, saldrá el video oficial de ‘Lo Muerto’, se trata de un videoclip de animación, creado y dirigido por los animadores Luis Téllez y Karla Castañeda, los cuales tuvieron total libertad creativa y cuyo trabajo aún es una incógnita para la misma agrupación.
Asimismo, cuentan que trabajan en un disco en vivo, en acústico y con otras sorpresas, del concierto que dieron en el Auditorio TELMEX de Jalisco.
Y como ver a Cuca en vivo es una experiencia imperdible, el 28 de marzo se presentarán en el Foro Felipe Villanueva en el Parque Naucalli junto a La Castañeda y La Lupita. Además, el 15 de mayo darán un concierto en el Frontón México. También van a girar por toda la república, para más información sigan las redes oficiales o consulten la pagina oficial de Cuca.
Entrevista: Olivia Luna
Texto: Fani Bárcenas
Parte de la entrevista en Ruido Blanco: