Como los buenos vinos…
Así es como se autodefine la Cuca, quien demostró que a sus 30 años como formación son una de las bandas del rock más fuertes, carismáticas, propositivas y sobre todo que siguen sonando actuales.
Esto le dejo claro el viernes pasado en su presentación, con el cual inician la celebración de tres décadas como agrupación en el Teatro Metropolitan en donde por espacio de más de dos horas entregaron las canciones más emblemáticas de su trayectoria e igualmente esas nuevas que ya son del gusto de las nuevas generaciones.
Y es que de lo que si pueden presumir José Fors, Nacho “Implacable” González, Carlos Ávilez y Alejandro Otaola es que a ellos no lo van a ver solamente la generación “chavorruquesca”, sino que ya son familias donde niños y niñas de 8 años en adelante prefieren saturar sus oídos con melodías y letras de la llamada “QK”.
En punto de las 20:45horas hicieron su aparición en el escenario el cuarteto y al grito de “Cuca, Cuca, Cuca”, cada uno tomó posición para iniciar el festejo. Con El hombre de la marcha, comenzaban a calentar garganta los casi tres mil cucafans que “salieron de la alcantarilla“, como les dijo Fors para ser un coro magistral. De inmediato la prendidez llego con Todo Con Exceso, Mátame Antes, Arre Lulu, Rock solo Rock, Que Chingaos y el Mamón De La Pistola pusieron los decibeles muy altos.
“Gracias por festejar con nosotros y aunque aún no es 2020 para nosotros inician los festejos de 30 años. Muchas gracias por seguir con nosotros y ser parte de esto. Se siente bien chingón. Esto es para ustedes cabrones”, dijo Fors en una de sus pocas interacciones con sus seguidores.
Cuca hizo un recorrido por lo mejor de todas sus producciones e incluyó el estreno de sus dos nuevas rolas que vendrán en su próxima producción que saldrá en diciembre porque ellos si siguen haciendo discos completos y no cachitos de lotería; Lo Muerto y Sirenita al Revés fueron los estrenos en vivo que dio la banda y que sin duda serán del agrado de otras como las que desfilaron como Cosas Peligrosas, Gordibuenas, Mujer Cucaracha, Caperucita, Hijo del Lechero, Alcohol y Rock and Roll, Tu Flor y El Son Del Dolor, con la cual hicieron una falsa despedida.
Y es que en el encore la banda hizo su acústico con Los Legionario del Pisto, Acariciando y la infaltable Balada que fue monumental con el coro y el cariño con el que La Cuca y sus seguidores la hicieron; con La Pucha Asesina y Cara de pizza la banda cerró su festejo no sin antes entregarse al cariño de sus “chilangos chingones” que a pesar de que querían otra tuvieron que aceptar que el show había terminado pero que próximamente “aún hay más amigos” de la Cuca por mucho tiempo.
Texto: Oswaldo Ángeles