‘Hyperspace’, marca el inicio de un viaje sin regreso con Beck
‘Hyperspace’ está tan cercano a los años luz, al 2020, pero más cerca del Beck tranquilo que del desmadroso. Aquel primer track, ‘Saw Lightining’, nos engañó a todos: de entrada, es el corte más sincopado (y casi el único) del álbum, sino que además su espíritu funkadélico, más que venir “del futuro”, aterriza en el presente.
Y es que esa “hiperconectividad” a la que alude el título del álbum, para Beck no es tan mala, e incluso se percibe cierto regocijo de ella en algunos de sus letras. Pero sí asume que el ansia de tener y saber más se ha vuelto voraz, y marca nuestra manera de ver el mundo y relacionarnos.
“Faster, farther, longer, harder
I just wanna grow and grow
Beauty, light and crushing life
Wanna feel more and more, With you”
Solos ante la luz de nuestros móviles, imaginamos conectar emocionalmente con alguien, aunque sea de manera líquida e inevitablemente dolorosa.
Simplemente una pulsión.
Volviendo al álbum, la presencia de Pharrell Williams invita a la incursión de Beck en la música negra contemporánea, desatando una vez más la avidez del Sr.Hansen por ir más allá de si mismo.
La gran virtud de ‘Hyperspace’ está en el hallazgo de una particular armonía sonora, diríamos que única, que se sitúa a medio camino del presente más pop, actual, y claro, algo de psicodelia, folk, ingredientes orgánicos de su renacer creativo en el año 2014.
Lo cual lo establece como buen álbum que, a medio trayecto de ‘Colors’ y ‘Morning Phase’, cierra una trilogía con la que Beck se convierte en un personaje crucial en la música de esta última década.
A partir de hoy ‘Hyperspace’ ya está en redes sociales y a la venta en cualquiera de sus presentaciones, también lo pueden escuchar en RuidoBlanco así como en la app de IHeartRadio.
Texto: Andrés Villela